Las mejores Hamburguesas de Barcelona, Restaurantes de Barcelona, Restaurants

LA BURGUESERíA

La Burguesería. Plaza Lluís Millet 10, St Cugat del Vallès. T 93 674 27 17. www.laburgueseria.com

Nacho Núñez en La Burguesería
Nacho Núñez en La Burguesería

En la mítica plaza de la Estación de Sant Cugat, encontramos esta exquisita hamburguesería abierta desde hace aproximadamente medio año. A ellos no les gusta aprovechar el filón de la moda de las hamburgueserías, se ven más como una moderna brasería que ofrece carne de calidad y además otros platos de cocina creativa, como demuestra su apetecible lista de entrantes, tartares o sus entrecots de carne de Nebrasca que ofrecen tan sólo los fines de semana.

La Burguesería está compuesta por 3 socios: Xavi Grau, de la mítica charcuteria/delicatessen de Sant Cugat J. Grau, Martin Marchese, propietario también de la Santa Gula y jefe cocina del Dry Martini y el joven Nacho Núñez (en la foto) que dejó su huella en la publicidad antes de dedicarse a la restauración. Como podéis intuir, este restaurante promete. A la vez que la hamburguesa es el plato estrella, también lo son los cócteles, ofreciendo por las noches un cálido lugar para tomarse uno si es que puedes escoger entre  su amplia y apetecible oferta. No podía ser menos viniendo del jefe de cocina del Dry Martini, que deja su sello de calidad con sus años de experiencia en el sector.

El plato estrella es la hamburguesa Magna, hecha con carne de Wagyu, foie de pato, nube de manzana caramelizada, demi-glace y cebolla crujiente (15 euros), pero como yo no como foie por principios, he compartido con Alex una Chepepito (versión uruguaya) con filete de ternera con bacon, mozzarella, lechuga, tomate, pimientos del piquillo, olivas, huevo duro. mayonesa y una Bota, con hamburguesa de ternera, mozzarella de búfala, porchetta romana, tomate seco, rúcula, parmesano y pesto. Estaban relamente deliciosas. Las hamburguesas están hechas principalmente de carne ecológica de Gerona y de Wagyu de bueyes criados en Burgos, aunque también tienen de butifarra, de pollo o vegetariana (hamburguesa hecha con tofu). Lo ideal, antes de tomarte una de sus hamburguesas, es compartir alguno de los apetecibles entrantes que ofrecen como por ejemplo unos aros de cebolla de Figueres rebozados en tempura con salsa de mango picante, un queso provolone fundido con cebolla confitada, rúcula y olivas de Kalamata o unos huevos estrellados a la brasa con setas y jamón ibérico.

No sólo las hamburguesas no dejan indiferente, el local en sí es precioso, muy precioso más bien. Ubicado en una plaza peatonal con amplias cristaleras que dejan entrar luz natural a chorros, y dentro, con ambiente recogido y luces de las bombillas que emiten una ténue y confortable luz, este local se establece idóneo para ir tanto en família, con amigos o en pareja. Las mesas y sillas son de brocanters de la zona y los muebles de madera maciza son de Arxe, que conozco bien porque en mi casa tenemos dos mesas de la firma. Hay troncos de madera apilados y cajas recicladas que sirven de estantes y los camareros van con camisa de cuadros. Todo está muy bien cuidado, muy Kinfolk y no da rabia alguna ya que se ha hecho con elegancia y buen gusto innato, sin esnobismo y con mucho cariño. Una curiosidad: puedes dibujar en las paredes, que están llenas de garabatos, firmas y frases multicolor de los clientes que han dejado su nota de alegría permanente (a ver quién encuentra In the Mood for Food), que compiten con una precioso mural hecho por Yoshi Sislay, un artista japonés emergente.
La capacidad del local es de 50 personas y 25 en la terraza. No hacen reservas y el precio medio ronda los 20 euros.

Buena suerte a todos.