Alimentos, productos, curiosidades, Curiosities, Establecimientos gastronómicos

DELACREM, UNA HELADERÍA MUY ARTESANAL

DelaCrem. Enric Granados 15-17. 08007 Barcelona. T 93 124 66 51. www.delacrem.cat

DelaCrem es una de las poquísimas heladerías de Barcelona en las que el helado se elabora bajo las más estrictas normas artesanales y en un obrador ubicado en el mismo local. Su propietario es Massimo Pignata, piamontés de pura cepa que confiesa que cuando empezó a trabajar el helado, su objetivo era recuperar los sabores del helado de lechería a la que iban sus abuelos cuando él era un niño. Os dejo con esta bonita muestra del trabajo diaro de Massimo en DelaCrem en el que podréis apreciar cómo elabora su helado:

DelaCrem. pasión por lo artesano from slowartworks on Vimeo.

En mayo de 2010 Massimo abre DelaCrem, un pequeño y cuidado establecimiento donde produce helados como se hacía antes, con ingredientes frescos y puros, recuperando los sabores del helado de lechería. Se trabaja el helado italiano y la repostería según las más estrictas normas artesanales y con los siguientes pilares:

1. Hay una receta dedicada a cada gusto de helado, y continuamente se va optimizando. No se usan bases comunes. Cuesta más tiempo, pero el resultado, se siente en el paladar.

2. Massimo eligió una barra sin exposición, plana, con pozos para guardar el helado. Esto permite una mejor conservación del helado, una temperatura más alta y estable. “En lugar de -15º o -16º puedo mantener mi helado a -12º; la sensación de frío es menor y el sabor más intenso al paladar”.

3. No hay cámara frigorífica. Lo que se produce acaba siempre directamente en la barra de los helados, fresco y cremoso, listo, para ser servido. Esto obliga a producir todos los días (por lo menos en temporada alta). Es más tiempo dedicado a la calidad.

4. No ahorra en ingredientes. Los huevos, el mató, el yogurt son frescos y naturales. La avellana es la misma que de la que se enamoró en Italia. El pistacho lo importa de Sicilia; el turrón es del consorcio de Jijona; el dulce de leche importado de Argentina; la vainilla bourbon de Madagascar; el café de la mismísima cafetera, marron glacé de pastelería. La fruta, de los mercados de la ciudad o, cuando hay que controlar aún más su grado de madurez, de las fruterías del barrio. Usa fruta de temporada y se permite usar pulpas congeladas solo con la fresa (fuera temporada) y la fruta de la pasión. Y dicho todo esto, está claro que ni hablar de colorantes o conservantes.

Pero DelaCrem no es sólo un pequeño local en el que hacen un helado artesanal delicioso, sinó un agradable y familiar centro de reunión en una íntima parte del Eixample; el final de la calle Enrique Granados es peatonal. Además cuenta con una muy agradable terraza para disfrutar especialmente en los meses cálidos (aunque no hace falta reservar el helado sólo a esa época). Desde aquí no puedo dejar de felicitar al equipo que lleva su imagen y publicidad (pero no han hecho su logotipo), el estudio creativo Slowartworks, -que también destaca por su labor artesanal- compuesto por estos dos handycraft men: el copy Joan Gallifa y por el arte Dani Vergés. Ambos amigos y con mucho talento.