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LA CONFITERIA, HISTORIA DE UN LOCAL MÍTICO DESDE 1912 HASTA HOY

Enric y Lito, los socios, detrás de la barra de La Confitería
Enric y Lito, los socios, detrás de la barra de La Confitería

La Confiteria. Carrer de Sant Pau, 128, 08001 Barcelona. Abierto para cenar hasta las 3h

La Confitería es uno de esos locales míticos de la ciudad, los que hacen que te sientas orgulloso de ella y a mi parecer, el más bonito de todos. La Confitería por fuera quita el hipo: sus escaparates, su rótulo, los ángeles ilustrados, las puertas, los ventanales… es una joya, pero por dentro uno acaba de morir de amor sintiendo el Síndrome de Stendhal.

La Confitería tiene historia desde el 1912, pero la historia no se detiene aquí, ya que Lito y Enric, socios y amigos y personas encantadoras, han tomado las riendas en el 2015 y aunque parezca mentira, lo han hecho incluso más bonito. Gracias al savoir faire de los antiguos artesanos de hoy y su meticulosidad, buen gusto y atención al detalle, han podido recomponer su comedor con maderas recicladas, vitrinas antiguas e incluso han emulado los espejos de antaño y han reproducido los bancos de nuestro mítico tranvía azul para que los comensales se aposenten. Todo un viaje a la Barcelona modernista.

Y lo han convertido en un restaurante, una coctelería y como no, por su carácter romántico, de nuevo en una confitería. La carta destaca principalmente por sus foies, confits y embutits. Todo con materia prima de primera. Y como no, otra vez selección meticulosa de producto y elaboraciones. No te pierdas su bocadillo de albóndigas. Tan bueno el contenido como el pan.

Y en cuanto a la parte gráfica… esperamos estar a la altura. Enric y Lito, amigos de la infancia, llegaron a ::Frescota Foods:: porque querían ayuda en cuanto a la imagen corporativa y hemos tratado de hacer las cosas con tanto cariño como ellos. Ha sido un orgullo inmenso trabajar con ellos y para un lugar tan mágico como La Confitería.

El interior de La Confiteria
El interior de La Confiteria
Los estantes con las conservas en La Confiteriaa
Los estantes con las conservas en La Confiteria

– ¿CÓMO APARECE LA CONFITERÍA EN VUESTRAS VIDAS?

Por sorpresa, por casualidad. Estábamos en búsqueda de un pequeño local cuando nos enteramos que nuestro bar preferido de la ciudad estaba en traspaso, no lo dudamos un segundo, no se podía escapar esta oportunidad.

– CONTADNOS LA HISTORIA DE LA CONFITERÍA DESDE 1912 HASTA HOY.

En 1912, la familía Pujades abrió su pequeño negocio en la calle Sant Pau y tuvo sus años de bonanza con el auge de la zona del Paralel en sus años dorados de teatro. La familia vivía en el interior del local, en la rebótica -lo que ahora es el comedor. En el sótano estaba el antiguo obrador que aún conservamos intacto con la maquinaria de pastelería antigua y el horno -que algún día nos gustaría también restaurar para que volviera a ser útil.

En los años 80 y después de una letargo no tan popular para La Confitería, se cierran las puertas del negocio. Y la joya queda hivernando hasta finales de los 90, cuando se convierte en bar. Esto fue una gran suerte, porque gracias a ser un bar se salvó del despiece de todo el mobiliario. La Confitería vivío unos años dorados en los que fuimos asiduos clientes. Para nosotros era el bar más admirable de la ciudad. Y en el 2014, la fortuna se cruza en nuestro camino y nos lo traspasan. Restauramos la zona de mesas, empezamos con la oferta gastronómica y se instaura el cóctel como el ADN de la nueva Confiteria.

– ¿CÓMO REDISEÑASTÉIS LA PARTE DE ATRÁS?

Queríamos hacer algo que tuviera un aire parecido a la parte original , pero que si te fijabas más atentamente te dieras cuenta que era una aportación actual.
Estudiar el trabajo de los ebanistas en la madera de la tienda original fue un proceso muy bonito, tenía algo de arqueología: entrar en contacto con un tiempo donde las cosas tenían otra solidez, cuando las cosas estaban hechas para durar.  Hay ornamentos que se repiten aquí y en el Marsella, así que probablemente están hechos por la misma mano, seguramente un vecino del barrio. La obra de estos humildes ebanistas de barrio ha durado cuatro generaciones y es nuestro orgullo poder preservarla.
Primer plano de unas oníricos confits
Primer plano de unas oníricos confits

– ¿CUÁL ES EL CONCEPTO DETRÁS DE VUESTRA CARTA?

El respeto por materia prima de calidad y los métodos de conservación antiguos, en especial los confits, como el local demanda. Es por ello que parte de nuestra carta está formada por ahumados, confits, conservas y quesos artesanos, productos conservados y macerados como ya se hacía en 1912.

– COMO SURGE LA IDEA DE HACER “LA HAMBURGUESA CATALANA” (VUESTRO BOCADILLO DE ALBÓNDIGAS)?

La abuela de la cocinera tenía una receta espectacular de mandonguilles con ceps y trufa que casi hemos igualado y a su vez variado. Este plato no estaba en nuestra carta inicial, empezamos a servirla en plato y una día se nos ocurrió añadirle el pan y presentarla como una hamburguesa, de hecho durante dos semanas la denominamos “hamburguesa de la casa” pero unos dias después entramos en razón y se bautizó como “bocata de mandonguilles” que ahora se ha convertido en el plato estrella de la carta. Es un plato que nos ha costado mucho esfuerzo perfeccionar.

– HABLADME DE VUESTROS CÓCTELES Y VERMUTS

El vermut lo traemos de Reus, y estamos ahora mismo desarrollando vermuts especiales que están macerando los cocteleros en el antiguo obrador de la pastelería. En cuanto a los cócteles, vimos claro desde el primer momento que era la apuesta que debíamos llevar a cabo, nos apasiona. Y hemos tenido la suerte de encontrar gente entusiasta -y más experta que nosotros- que nos ayuda a intentar construir una cocteleria donde se cuide hasta el mínimo detalle.

– DESCRIBIDME VUESTRA COMIDA IDEAL, DÓNDE, QUÉ, CON QUIÉN.

Una de las grandes felicidades de trabajar en la Confiteria ha sido conocer a Álex, el propietario de la cervecería Jazz, en carrer Margarit. Nos gusta mucho, en un momento sin trabajo, ir a comer una hamburguesa en su local. Nos sentamos en la barra y lo miramos cocinar. En ese espacio, tras más de veinte años, habrá preparado unas cien mil hamburguesas, y todavía cree que algo se puede siempre mejorar. De él aprendemos el amor al propio oficio y la perseverancia que piden las cosas bien hechas. Pero como pasamos abundantes horas juntos en La Confitería mejor será que para la comida ideal nos dividamos los placeres por una vez. 
Lito: Yo me decanto más por una comida sin lujos: una tortilla de patatas que se deshace al cortarla, una carne rebozada bien fina y muy crujiente, un pescado hecho a la brasa. Platos que me hacen viajar a la infancia y recuerdan veranos en la playa.
Enric: Pues actualmente mi comida ideal sería en un día que mis hijas gemelas hubieran comido bien y duerman alegres. Entonces, con la casa en silencio y los juguetes ordenados, comemos los padres, y somos felices.
El bello interior de La Confitería
El bello interior de La Confitería
Ilustración del interior de La Confiteria
Ilustración del interior de La Confiteria
La maravillosa fachada de La Confitería
La maravillosa fachada de La Confitería

DESDE IN THE MOOD FOR FOOD, MUCHÍSIMA SUERTE ENRIC Y LITO NO SÓLO POR VUESTRA ILUSIÓN Y POR RESPETAR LOS LOCALES MÍTICOS, SINÓ POR SABER DARLES AÚN MÁS VALOR.